15 de enero de 2009

Cavad, cavad malditos!

Un buen dia, en 1963, en un poblado turco de la región de Capadocia, un habitante decidió hacer reformas en su casa, ampliarla... se habría comprado una cabra más, o pensaría tener mas hijos, da igual... pero cuando derribó una de las paredes de su casa, encontró que detrás, había otra habitación, y detrás de esta, otra, y otra... había encontrado la Ciudad Subterránea de Derinkuyu.


En Turquía, se calcula que hay unas 200 ciudades subterráneas, con una capacidad media de unos pocos centenares de personas cada una, pero en Derinkuyu, podrían alojarse con facilidad alrededor de 10.000 personas.
Es una obra de ingeniería impresionante; los arqueólogos, que han exlorado hasta ahora 20 niveles (unos 45 metros de profundidad) sospechan que la ciudad puede extenderse hasta los 85 metros.

Dentro de esta ciudad, por la que corre un río subterráneo, podemos encontrar establos, bares, almacenes, e incluso una habitación donde se celebraban cultos religiosos de una altura de tres metros (la altura media de la ciudad no supera los 1,70 metros) y 20 metros de largo. Un tunel de 9 km la comunica con la vecina ciudad subterránea de Kaimakli.
Además, tiene unos túneles de unos 10 cm de diámetro, que usaban para comunicarse entre los distintos niveles. Y como medida de seguridad, en dos puntos de la ciudad hay piedras de varias toneladas con las que bloqueaban la ciudad. Dichas piedras sólo podían moverse desde el interior, donde tenían una muesca.

Se cree que la construyeron los Hititas alrededor del año 1.400 antes de Cristo y desde entonces diversas civilizaciones la han usado para refugiarse de invasiones.
Otros autores han dado explicaciones más "imaginativas", desde que su fin fue protegerse de invasiones extraterrestres hasta que se construyeron durante la última glaciación, ya que en su interior hay una temperatura constante de 10-12 ºC, lo que les permitiría sobrevivir durante los largos inviernos de 8 meses.

La última fotografía corresponde al bar... jua jua jua, ya sea por invasiones, por extraterrestres o por glaciaciones, nunca puede faltar un bar en una ciudad-refugio.


4 comentarios:

Brusete dijo...

Me quedao con el culo vuelto...

angeloso dijo...

muy interesante oiga..

yo me adhiero a la teoria de los marcianos, o en todo caso los UMMITAS (espero un post referente a estos).

creo que en un pueblo de almeria intentaron hacer algo parecido pero en cuevas

saludos

Anónimo dijo...

Efectivamente, señor donangel, en un pueblo del sur de almería, o del norte de africa, según se mire, hicieron un experimento, pero en estados unidos se dieron cuenta y acojonados por las terribles consecuencias simularon un accidente aéreo y dejaron caer unas bombas atómicas... el resto es historia, tomates y fraga en bañador...
Un saludo muy fuerte

Jota___ dijo...

Q fuerte, nen.
Cuando leo sobre civilizaciones antiguas y restos que hasta hace nada desconocíamos, y veo el poco tiempo que han necesitado para caer en el olvido, me pregunto qué nos hace creernos la única civilización inteligente.
Si, como decía J.J. Benítez (maldito sea su nombre, y permanezca por siempre enterrado en sal), hubiese existido hace unos 5.000 o 6.000 una civilización desarrollada o incluso tecnológica anterior a la egipcia, y por cualquier razón hubiese desaparecido, no tendríamos ni puta idea. Y menos si lo que ha caído sobre sus restos no son nuevas calles y viviendas, sino cantidades ingentes de arena, provocadas por un cambio climático (este sí está contrastado) que a día de hoy llamamos desierto del Sahara.

...Somos todos como Santo Tomás...

Por cierto, ya tengo preparadas unas cuantas fotos para poner en el blog, que son ejemplos explicativos de los usos y disfrutes de las cámaras digitales. Dadme tiempo, que yo me buscaré la caña.